Escapada a Tarragona con OUIGO: lugares que ver

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Los mejores lugares que ver en tu escapada a Tarragona

¿Fin de semana romántico en Tarragona? ¿Excursión con amigos o reunión familiar? Tarragona está a una distancia ideal para organizar una escapada en cualquier momento del año. Playas, historia, cultura, gastronomía y diversión están más cerca que nunca gracias a la alta velocidad a bajo precio de OUIGO que te lleva hasta la estación Camp de Tarragona.

La antigua Tarraco romana

La antigua Tarraco fue fundada en el año 218 a.C. por los romanos y alcanzó su máximo esplendor en el siglo II d.C. La mejor manera de empezar a conocer todo el legado romano es en el Museo de Historia de Tarragona donde se expone una maqueta que muestra la ciudad como era entonces. La entrada es gratuita y facilita entender la ruta romana al poder ubicar las diferentes construcciones romanas en la Tarragona actual.

Nada más salir del museo encuentras las murallas defensivas, construidas en el siglo III a.C., que delimitaban el perímetro de la urbe. Originalmente, tenían una longitud de 3500 metros, de los que resta más de un kilómetro de muralla que rodea el casco antiguo de Tarragona. Como apunte es importante conocer que durante los siglos XVI y XVII, se reforzaron con diversos elementos para adaptarlas como defensa ante la artillería de la época.

Hoy en día, el Paseo Arqueológico transcurre entre la muralla romana y el añadido medieval. En su recorrido a través de jardines puedes ver varias estatuas y visitar tres de las torres, entre las que destaca la Torre de Minerva donde está la inscripción romana más antigua de España.

Antes de abandonar el casco antiguo y dirigirte a lo que era el Foro, puedes visitar el Museo Arqueológico de Tarragona (MNAT) y contemplar su colección de restos romanos.

El Foro ocupaba varias plazas y calles y era el centro de la actividad administrativa, cultural y religiosa de Tarraco. Uno de los principales restos que han quedado es la Torre del Pretorio, que fue uno de sus principales accesos. A su lado, está el circo romano, construido en el siglo I d.C. y uno de los mejor conservados del mundo. Actualmente, hay una parte soterrada bajo edificios construidos en el siglo XIX que puede visitarse. 

Tras ello, queda por ver el Anfiteatro romano construido en el siglo II d.C. donde tenían lugar los combates de los gladiadores y las luchas con las fieras. Aún se conserva gran parte de la grada y es el monumento más visitado de la ciudad.

La Tarragona medieval

Aunque es más conocido su rico pasado romano, la ciudad posee un importante patrimonio medieval.

Tras la caída del Imperio Romano, Tarragona estuvo dos siglos bajo dominio visigótico hasta que fue tomada por los musulmanes en el año 713 d.C. Con la huida de las autoridades eclesiásticas, la ciudad quedó casi deshabitada y no fue repoblada hasta inicios del siglo XII. 

La Tarragona medieval se concentraba en la parte alta de la colina y rondaba solo los 5000 habitantes. La Catedral, dedicada a Santa Tecla, patrona de la ciudad, es el exponente de la Tarragona medieval. Su construcción se inició en el siglo XII y fue consagrada en 1331. En su interior se conserva un rico conjunto de arte medieval. Si te interesa visitarla la entrada es de pago y ofrecen varias tarifas según quieras ver también el Museo Diocesano o subir al campanario.

El Plà de la Seu es la plaza central y donde se sitúan los edificios más relevantes de la Tarragona medieval presididos por la Catedral. Los más emblemáticos son la Casa Balcells y la antigua rectoría. Muy cerca, en el último tramo de la calle Mayor se encuentra el Antiguo Ayuntamiento, que fue el consistorio de la ciudad durante cuatro siglos. 

Tarragona posee otros edificios medievales como el antiguo Hospital de Sant Pau y Santa Tecla, fundado en 1171 y del que solo queda la fachada, la capilla de Santa Tecla la Vieja, la capilla de Sant Pau y la iglesia de Sant Llorenç. 

En torno a la plaza dels Àngels se ubicaba la Judería, una de las más grandes de Cataluña, que contaba con sinagoga, escuela y baños. Desafortunadamente, quedan muy pocos restos de ella.

Para acabar, en medio del Anfiteatro puedes ver los restos de la Iglesia de Santa Maria del Miracle.

La Tarragona modernista

Entre finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX la estética modernista fue protagonista en muchos edificios diseminados por toda la ciudad que hoy suponen un interesante legado por parte de los arquitectos de la época. La barandilla del Balcón del Mediterráneo es una de estas obras y bajando por la Rambla Nova puedes contemplar la Casa Bofarull, la Casa del Doctor Aleu y la Casa Salas. Otras construcciones modernistas son el mercado municipal, el Rectorado de la Universidad Rovira i Virgili, el Teatro Metropol y la Casa Ximenis. El modernismo también está presente en lugares religiosos como el altar y el manifestador del Santuario de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, obra de Antoni Gaudí.

Esperamos haberte dado ideas para tu escapada a Tarragona. Si te ha quedado algo por ver, con OUIGO y su alta velocidad accesible para todos puedes volver siempre que quieras y, por supuesto, conocer nuevos destinos para tus escapadas de fin de semana. OUIGO, let’s go!