9 pueblos con encanto de Barcelona

¿Viajas con OUIGO a Barcelona, desde Madrid o Zaragoza, y vas a quedarte unos cuantos días? Aprovecha para conocer otras localidades cercanas a la Ciudad Condal. La provincia catalana alberga encantadores pueblos para visitar cerca de Barcelona y pasar un día genial.

 9 pueblos que tienes que ver en la provincia de Barcelona

Sus paisajes de mar y montaña, así como sus pueblos con encanto, son un reclamo turístico para muchos visitantes que buscan planes cerca de Barcelona que completen su viaje. Si tú eres uno de ellos, no te quedes sin conocer los pueblos más bonitos para visitar cerca de Barcelona.

Sitges

A tan solo 40 kilómetros de Barcelona, encontrarás este precioso pueblo marinero, conocido internacionalmente por su Festival de Cine Fantástico, su carnaval y su Desfile del Día del Orgullo Gay. Sitges ofrece a sus visitantes unas increíbles playas y un ambiente festivo que no para. 

Sitges es también cultura; no en vano, es la cuna del Modernismo, estilo que puedes admirar en sus museos, como el Cau Ferrat o el Maricel, y en sus palacetes, siguiendo la Ruta Modernista o la Ruta de los Americanos. En tus paseos por las calles empedradas de su casco antiguo, descubrirás el Sitges más mediterráneo, con las antiguas casas de los marineros y pescadores.

Sant Pol de Mar

Sant Pol de Mar es uno de los pueblos más bonitos de la comarca del Maresme. Es un antiguo y típico pueblo de pescadores de calles estrechas, casas encaladas, playas y calas rocosas. La población atesora esa tradición marinera y un importante patrimonio de arquitectura modernista, como sus casas con jardines llenos de palmeras y fuentes que construyeron los indianos. Sant Pol invita a descubrir la belleza de sus plazas y rincones y a disfrutar de su gastronomía, con productos del mar y de las cercanas huertas. Un paseo hasta el monte y una visita a la ermita de Sant Pau te recompensará con una impresionante panorámica que abarca toda la costa hasta la ciudad de Barcelona.

Sant Jaume de Frontanyà

En la comarca del Berguedà, Sant Jaume de Frontanyà es un pequeño núcleo urbano de no más de veinte casas distribuidas en dos calles empedradas que confluyen en la plaza donde están la iglesia y el ayuntamiento. Totalmente rodeada de bosques, el municipio se asentó en un claro alrededor de la iglesia de Sant Jaume, una construcción románica del siglo XI, declarada Monumento Histórico-Artístico. La naturaleza es la reina del lugar, donde en otoño puedes oír la berrea del ciervo mientras paseas entre los pastos y las fuentes. Es un lugar ideal para hacer excursionismo y disfrutar de un privilegiado entorno.

Castellar de N’Hug

Castellar de N'Hug, en la comarca del Berguedà, ha sabido conservar su historia a lo largo de los siglos. Aún hoy, puedes admirar sus casas construidas con piedra, madera y tejas, y sus calles empedradas y estrechas que mantienen el mismo aspecto rústico y tradicional de antaño. Esta estética convierte al pueblo en un lugar único, ubicado en un entorno natural de montaña con prados y bosques donde habitan zorros, rebecos, ciervos y tejones y cuyos cielos son surcados por las aves rapaces. Una de las excursiones más populares es la que lleva hasta el nacimiento, las fuentes, del río Llobregat.

Cardona

Cardona es una población de la comarca del Bages conocida principalmente por la Montaña de Sal y el Castillo de Cardona. Es una visita muy recomendable para ir con niños, pues les sorprenderán y divertirán ambos lugares. El centro histórico de la población está catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional. Su imponente castillo, la mayor fortificación medieval que hay en Catalunya, empezó a construirse hace 2500 años y fue la residencia de los señores de Cardona, llamados «los Reyes sin corona». Disponen también de una visita teatralizada que encantará a los más pequeños.

La Montaña de Sal es un fenómeno natural que aún crece cuando la lluvia la erosiona. Tiene cerca de dos kilómetros de profundidad y ofrece todo tipo de formas y texturas curiosas y puedes caminar por los túneles que la perforan. 

Les Gunyoles

El pueblo de Les Gunyoles pertenece al municipio de Avinyonet del Penedès. Es una pequeña población situada al pie de la sierra del mismo nombre que destaca por estar completamente rodeada de viñedos y por ofrecer unos preciosos paisajes a sus visitantes. Es imprescindible subir al Mirador del Puig de la Mireta, que domina toda la llanura de esta tierra famosa por sus vinos y cavas.

Les Gunyoles es un lugar que debes conocer paseando por su casco antiguo, admirando antiguas edificaciones, como la casa señorial de Can Rialb o la torre romana, y dejándote llevar por su ambiente calmado y relajante. 

Bagà

El origen de Bagà data de 1233, fecha en que le fue concedida la Carta de Población, aunque el pueblo estaba ya documentado desde el siglo IX. La historia está muy presente en el conjunto medieval del municipio, como la plaza Galceran de Pinós, rodeada de soportales con edificios antiquísimos, o el sector de las murallas y el antiguo palacio de los barones de Pinós, que alberga una exposición permanente sobre los cátaros. Fuera de las murallas, puedes visitar la iglesia de Sant Esteve, del siglo XIII, y el santuario de Paller.

Bagà goza de una naturaleza privilegiada, ya que está situada en el Parque Natural del Cadí-Moixeró, un lugar ideal para hacer excursiones y visitar el nacimiento del río Bastareny.

Mura

La localidad de Mura está situada en el Parque Natural del Sant Llorenç del Munt i l’Obac y es otro de esos pueblos de la provincia de Barcelona que te trasladarán a épocas muy antiguas al pasear por sus calles empedradas y jalonadas por fachadas medievales o al visitar la iglesia románica de Sant Martí. 

El encantador pueblo de Mura destaca por los vestigios del pasado y por la naturaleza que lo rodea. Un entorno envidiable que cuenta con setenta fuentes naturales a lo largo de la Ruta de las Fuentes, y las conocidas cuevas de Mura, una cavidad formada por una sola galería de unos 200 metros de profundidad.

Rupit i Pruït

Rupit y Pruït son los dos núcleos urbanos que forman esta localidad de la comarca de Osona, situada en la zona del Collsacabra. Al pasear por sus antiguas y estrechas calles del casco histórico, te parecerá haber retrocedido en el tiempo hasta la época medieval, pues la población se originó alrededor de la construcción de un castillo allá por el año 1000. 

Muchas de sus antiguas casas de piedra aún conservan la fecha y el escudo de los fundadores. Puedes visitar las iglesias de Sant Miquel Arcàngel, Santa Magdalena y Sant Llorenç Dosmunts, entre otras, y no dejes de atravesar algunos de los puentes de la población, como el de Can Badaire o el puente colgante. En sus alrededores, destaca la ruta hasta la cascada de Sallent, en la que encontrarás molinos abandonados, saltos de agua, balsas y fuentes.

Disfruta con nuestros trenes low cost de alta velocidad a bajo precio y no dejes de descubrir magníficos lugares como estos. ¡OUIGO te acerca a tus destinos favoritos!